Aún no conoces a Moley, te preparará unos platos estupendos

¿Aún no conoces a Moley, te preparará unos platos estupendos?

Qué duda cabe que lo que es capaz de cocinar el robot Moley nos dejará a más de uno alucinados.

La cocina que habitualmente practicamos tiende a desaparecer, aunque es evidente que lo sabíamos. La llegada de los robots de cocina como la famosa Cecotec es alguno de los modelos más exitosos.

No obstante imagina poder tener en tu vivienda en todo instante de tu chef particular. Así es, siempre. En cualquier situación que desees y encima va a cocinar como le señales y de regalo te limpiará la cocina dejándotela impecable. De este modo ha sido diseñado, Moley hará eso y considerablemente más por tu familia.

La startup Moley Robotics ha diseñado la más avanzada cocina robótica del del sector. Se trata de de un dispositivo compuesto por 2 brazos humanoides milimétricamente articulados y sensores táctiles controlados a través de un potente software. El robot es la extensión de un conjunto de aplicaciones inteligentes a los que está conectado, como es el horno, aparte de una pantalla táctil con la que lo controlas.

A fin de que el sistema haya aprendido a cocinar en la cocina, ha sido entrenado reproduciendo los movimientos del Chef Tim Anderson. El robot dispone de un catálogo de recetas que puede efectuar en cualquier instante, a las que le puedes agregar las que desees vía on line.

El inicio y desarrollo de Moley tuvo sus principios en el mes de enero de dos mil catorce, cuando Mark Oleynik decidió poner el proyecto en fse de desarrollo en colaboración con Shadow Robotics, Yachtline, Dysegno, Sebastian Conran y Mark Cutkosky, maestro de la Universidad de Stanford.

El resultado de un año de incesante trabajo fue expuesto en dos mil quince en diferentes congresos de automatización del planeta, como puede ser el que se desarrolló en Hanover Messe o bien el CES de la ciudad de Shangahi, en donde se llevó el premio al robot más innovador del mercado. Ese galardón sirvió como trampolín para impulsar el proyecto y preparar su salida a la venta.

Se prevé que podamos comprarlo en dos mil veinte. Al igual que sucede con cualquier producto tecnológico innovador, el costo de salida va a ser evidentemente prohibitivo hasta el momento en que se consigan democratizar los costes. En un principio el producto atenderá las necesidades de centros de estudios y también industria alimentaria.